En conversación con Carmen Guerrero Sotelo, Climate Solutions Manager (gerente de Soluciones climáticas) en Kilimo conocimos más de esta empresa de tecnología enfocada en solucionar problemas asociados con el cambio climático.

En particular Kilimo ataca la problemática relacionada con la falta de agua. “En el colectivo las personas pensamos que las empresas usan grandes cantidades de agua, pero el 72% del agua mundial se destina a la agricultura y el desperdicio de agua, sobre todo en países en desarrollo, es muy elevado”, explicó Carmen Guerrero.
La especialista comentó que el uso de agua con fines agrícolas varía de una zona a otra, pero en estados productores como Coahuila el uso del agua agrícola rebasa el 80%; en zonas de alta actividad agrícola como la Comarca Lagunera o Piedras Negras se tiene un diagnóstico de estrés hídrico y acuíferos sobre explotados; este diagnóstico es similar al del Valle de México: se extrae más agua de la que se puede recargar.
Esto, aunado a la pérdida de suelo de conservación, con capacidad de infiltrar los mantos acuíferos, hace que se enciendan focos rojos en las empresas dedicadas al cuidado del ambiente. “En Kilimo creemos que podemos abordar el problema desde diversos aspectos y decidimos atender al sector en el que más se desperdicia.”
Sistemas de riego ineficientes
La vocera comentó que el método de riego por inundación desperdicia entre el 60 y 70% del agua que se usa; por lo que uno de los ángulos de Kilimo es llevar tecnología agrícola que permite lograr eficiencia en riego.
Carmen resaltó que han recibido distintas distinciones por sus herramientas de riego usando Inteligencia Artificial y Riego de Precisión. “La mayor parte de la agricultura es familiar, de autoconsumo y no se ven los beneficios de tecnoficarlo todo; lo que hacemos es llevar la tecnología a los agricultores y buscamos que los agricultores paguen por los equipos y el acompañamiento técnico para para se comprometan con los proyectos; esto tiene un costo alto, pero también tenemos inversores que pueden ayudar a financiar los proyectos y esto impulsa una cadena de agricultura más eficiente”
La vocera comentó que al finalizar la temporada agrícola los agricultores reciben un reembolso por su participación en el proceso de tecnoficación al que llaman “pago por servicios ecosistémicos”,
Con este tipo de acciones han creado proyectos de agricultura regenerativa que buscan regresar a los suelos a estados óptimos de biodiversidad y producción.
El poder de la acción colectiva
Carmen Guerrero Sotelo relató el caso de éxito que tuvieron con Intel, mediante el cual la empresa patrocinó diversos proyectos hídricos para lograr un equilibrio hídrico en la zona de Lerma, Chapala, donde tienen una fábrica de Microchips. Mediante un análisis determinaron que había dos perfiles de agricultores y en colaboración con otra ONG lograron superar la meta establecida por Intel para alcanzar la neutralidad hídrica.
“En los proyectos de gestión sostenible del agua se habla mucho de la acción colectiva, porque se requiere integrar la visión de empresas, agricultores, comunidades, ONGs, cooperativas, entre otros.”
La especialista comentó que es clave buscar grupo de interés que sean aliados para atender estas problemáticas de manera conjunta con Cooperativas Agrícolas, Entidades Gubernamentales, Secretarías (en este caso como la Secretaría de Desarrollo Rural, Secretaría de Agricultura) y Fondos de agua.
Nuestros aliados clave son otras startups que también atienden el tema de gestión del agua. Cooperativas agrícolas, entidades gubernamental,esl secretaría de desarrollo rural, secretaría de agricultura y Fondos de Agua.
Finalmente la vocera comentó que, aunque estas acciones los enorgullecen, cada vez ven más necesidad de actuar y que el trabajo reportado para el 2030 se debe fortalecer con acciones colectivas de la sociedad, por lo que invitó a las audiencias a unirse a programas de restauración y conservación del país.
“También es importante fijarse en las empresas que están siendo responsables, consumir de productos agrícolas y de consumo que no tengan una huella hídrica tan costosa. Es importante hacer conciencia y conexión con lo que consumimos”, concluyó.